El poli bueno

Tengo cuernos, he de asimilarlo, soy uno de los novios de la soledad, una mujer de doble filo, uno agradable y otro cortante, aunque yo también tengo mi culpa, he de reconocerlo, el blues y los cigarros son mis amantes, espero que me acompañen a la muerte.....
la calles siempre repiten las mismas frases, son algo cansinas y hoy llueve de nuevo, como en una vieja canción de folk, “no tengo casa, ni familia, solo unos dólares en el bolsillo y mis botas mojadas”,
pero tengo tu amor, forjado, dentro del pecho como un nudo asmático, una alita de pollo atorada.....
deseosa de unas manos firmes que le hagan la maniobra de heimlich, eso es el sexo para mí, un salvaguardo que me recuerda que sigo vivo, para bien o para mal.....
a ver como le explicas todo esto a un policía que llega a tu casa para decirte que eres prófugo de un hospital, no sabría como explicarle que igual de enfermo estaba allí que aquí, resaltando la diferencia de que al menos en mi casa podía fumar, total, que el muy capullo va y me dice:

-tiene usted puesta una denuncia....
-!bueno¡ era de esperar, no le preguntaré por qué, no me interesan los términos legales, sea lo que sea no lo voy a poder pagar, me declaro insolvente....
-¿está usted seguro de eso?
-¿No ves acaso en la pocilga dónde vivo? (nunca se debe responder una pregunta con otra, ¿pero no es evidente que no tenía, ni tendré dinero?)
-bueno..... vaya al juzgado mañana a primera hora, con este documento, a recoger la información judicial en torno a su caso, búsquese un buen abogado y de paso un trabajo.
-¿para qué?, ¿para vivir como usted? (respondo alterado)
-mira chico, no quiero tener más problemas......


parece que hoy es mi día de suerte, me tocó el poli bueno, alomejor tiene problemas de erección que son más importantes que la pobre existencia de mi ser, ¿quién sabe?, yo no tengo dinero pero al menos se me pone dura...... que triste desgracia, mujer, trabajo e hijos..... relaciones sociales, laborales, ascensos, medallas al mérito..... todo eso es sinónimo de ansiedad, yo no estoy nervioso nunca, no tengo nada qué jugarme, bueno si, mi sombrero que aparte de estar hecho polvo huele un poco a humedad...... (puaj)

fiuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu, con toda la movida se me olvidó la tetera puesta en el fuego......
Que reconfortante es sentarse uno, solo, con un té en la mano, frente a la televisión, me encanta mi tele, no funciona, por ello es tan cojonuda, pero que al menos no digan que no tengo, ya que se ve como un pecado no poseer una, además.... ¡si no dónde coño voy a poner la foto de familia! (es mi cara junto a unos cuantos pitufos, recortados meticulósamente de una revista infantil, eso sí enmarcados, que le dan estilo), me sirvo el té (yo mismo, no tengo "pornochacha", lo más parecido que tengo es una botella de horchata, ¿cabrá por ahí?) bebo el primer sorbo y me sumerjo en una dulce y cálida verborrea introspectiva.